Siempre he realizado tutorías, en especial dirigidas a niños pequeños. Mi metodología es simple; comienzo por introducir un poco el tema que se aprenderá ese día, explico por medio de ejemplos simples de comprender para un niño, como con cosas de la vida cotidiana o dibujos. Me gusta dejarles ejercicios, de los cuales los primeros resolveremos juntos, para luego permitirles realizar los otros. Me gusta más enfocarme en lo que hacen bien que en sus errores, de esta manera no sienten temor de fracasar, ya que es un espacio de aprendizaje y no de competencia. También me gusta dejar tareas simples de lo que se vio en clase. En ocasiones realizaría actividades más didácticas como un Kahoot, juegos de matemáticas que hay en Internet, etc. Me adapto al ritmo de aprendizaje de los niños, y a la manera en la que aprenden ya que yo, al ser estudiante también, sé que no todos aprendemos de la misma forma y todos van a un paso distinto. Las matemáticas son algo muy bonito que, lamentablemente, no muchos saben enseñar, causándoles cierta aversión a sus estudiantes por la materia. Si se enseña de forma correcta, divertida, didáctica y sin infundir terror, todos disfrutarían del arte de las matemáticas.
Finalmente, realizaría exámenes semanales para saber si los niños realmente han comprendido los temas o si necesito profundizar mucho más. Quiero que todos tengan las mismas bases y salgan amando a las matemáticas tanto como yo lo he hecho a lo largo de toda mi vida.