Habiendo atendido a ciertas palabras sabias de compatriotas ilustres, se puede afirmar sin temor que no hay definición más amable para entender lo que es la literatura que “entender lo que se lee”. La literatura no está ligada necesariamente con la gramática puesto que es dado a la imaginación concebir pueblos donde se escriba de cualquier manera y donde pudiera llegar la letra a expresar ideas....
Habiendo atendido a ciertas palabras sabias de compatriotas ilustres, se puede afirmar sin temor que no hay definición más amable para entender lo que es la literatura que “entender lo que se lee”. La literatura no está ligada necesariamente con la gramática puesto que es dado a la imaginación concebir pueblos donde se escriba de cualquier manera y donde pudiera llegar la letra a expresar ideas. A pesar de esto es difícil encontrar un arte más eficaz para acercar el entendimiento al valor preciso de las palabras y a la formación clara de oraciones que la gramática. Si bien ésta es edificio estéril cuando se estudia aisladamente, la lectura de obras clásicas acompañada de instrucción gramatical es fecundísima. La metodología a seguir no es distinta de la que se emplea en el estudio de cualquier lengua occidental: se pasa de lo elemental a lo complejo. Si bien no vamos a inventar nada nuevo, podemos, en todo caso, tratar los temas de la manera amena y atractiva. Por decirlo de otra forma, el método no cambia sino la aplicación del mismo.