Si alguna vez te has cuestionado sobre cómo lograr un proceso efectivo de enseñanza-aprendizaje de idiomas, independientemente si eres estudiante o maestro, esta publicación será de tu interés.
Si bien la enseñanza de idiomas está determinada por sus teorías, enfoques y aproximaciones de estudio, las cuales, a su vez, se traducen en una determinada metodología. En el aprendizaje, por su parte, se pueden identificar los tipos de inteligencia (vistas como formas distintas de aprender). De este modo, el rol del maestro depende tanto del rol del estudiante y, viceversa. Esto es, la construcción de conocimiento está determinada por ambos roles, lo cual será la pauta para un proceso efectivo de enseñanza-aprendizaje de idiomas, a partir de los siguientes elementos:
1. La motivación
Cuando alguien decide aprender un idioma, dicha experiencia no comienza precisamente con el encuentro entre maestro-estudiante, estudiante-lengua meta o estudiante-material en la lengua meta; sino con la motivación del estudiante. Con ese impulso que lleva al estudiante a dichos encuentros. De este modo, el maestro es quien guía los encuentros y, tiene la responsabilidad de mantener la motivación durante todo el curso o programa. Por tanto, resulta un elemento determinante, que de igual manera depende de ambos roles y, jamás exclusivamente de uno de ellos.
De esta manera, la motivación extendida durante todas las etapas del aprendizaje, permitirá fomentar el estudio constante de la lengua meta.
2. El hábito de estudio
Si la motivación resulta un elemento determinante en el proceso de enseñanza-aprendizaje, el hábito de estudio resulta clave; ya que el maestro podrá potenciarlo a partir de los intereses específicos de cada estudiante. Por medio del hábito de estudio, cada estudiante será el constructor de su propio conocimiento y, por su parte, el maestro será más una guía y facilitador de contenido y recursos.
3. La interacción en la lengua meta
Más allá de si el maestro o la Institución Educativa deciden llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje de la lengua meta por medio de un libro, e independientemente de su figura protagónica, el maestro deberá hacer uso dedistintos recursos (revistas, diccionarios, periódicos, podcast, videos, aplicaciones, etcétera), para potenciar al máximo la interacción del estudiante con la lengua meta y, del mismo modo, trabajar integralmente en el desarrollo de las cuatro habilidades. En tales recursos, el maestro deberá destacar lo siguiente:
· Aspectos formales de la lengua meta (gramática): reglas, tiempos gramaticales, etc.
· Aspectos coloquiales de la lengua meta: usos extendidos, variantes de la lengua (por ejemplo, en el caso del idioma español y sus variantes: de México,Cuba, España, etc.)
· Aspectos culturales de la lengua meta: gastronomía, historia, personajes famosos, turismo, vida actual, etc.
De esta manera, el proceso de enseñanza-aprendizaje de idiomas no puede recaer en uno sólo de los roles o dirigirse exclusivamente a aspectos formales de la lengua meta, sino a una revisión de su cultura en contexto. Sin duda, debe concebirse somo una coresponsabilidad en donde la diversidad de propuestas y posibilidades resultan inacabables y por demás interesantes.