Hola, mi nombre es Ernesto.
Soy profesor de vocación por varios años, pero mi intención al enseñar es llegar a ser más que el concepto de solo "profesor". ¿Qué sentido tendría? ¿Cómo lograrlo?
Trataremos de responder a la primera pregunta. Según la RAE es "Persona que ejerce o enseña una ciencia o arte". A lo largo de los años he tenido muchos profesores de todo tipo, y muchos de ellos se han quedado en mi corazón por su manera de enseñar y darme el conocimiento necesario para poder formarme profesionalmente. Pero, como muchos de nosotros sabemos, no todos son así.
Los profesores que más recordamos son los que se preocupaban por nosotros, los que no solo se enfocaban por los primeros de la clase, los que te repetían el mismo punto uno y otra vez hasta que lograr entenderlo, los que te escuchaban sin juzgarte dándote la confianza para poder ser su guía.
¿Qué sentido tiene? Pues la de un profesor que logra llegar a sus alumnos no solo conocimientos, sino valores, confianza y el RESPETO que se merece cada estudiante. Mi intención es la misma, lograr ser aquel profesor que te acuerdes por muchos años por los grandes momentos y conocimientos obtenidos.
Y ahora ¿Cómo lograrlo? Pues no es fácil pero tampoco difícil. Así como la película de "Ratatouille" y su grandiosa frase "Cualquiera puede cocinar" ¿Puede aplicar lo mismo para la enseñanza? Si, cualquiera puede enseñar, pero así como en la cocina, no todos lo hacen bien.
No basta con los años de experiencia, no basta con estudiar en varias universidades, lo que uno debe tener es vocación, pasión para la enseñanza, y sobre todo, lo que más hago énfasis en mis clases, paciencia. Debemos entender bien que no todos aprenden con la misma velocidad, por ello mismo es que la paciencia debe ser la clave número uno de un buen profesor y la clave para poder marcar la diferencia del resto.
Y así todos los profesores antes juzgar a un alumno, primero debemos preguntarnos ¿Qué tenemos para ofrecerle aparte de la clase?