Una de las experiencias más gratas y que aún recuerdo con una sonrisa, es aquella que viví cuando acababa de terminar la secundaria. Había ganado un importante concurso de ensayo y había sido la mejor en las Pruebas de Estado en mi departamento.
Pues bien, me otorgaron una plaza para dictar clases nocturnas para estudiantes desde 6o. a grado 11o; toda una aventura, teniendo en cuenta que carecía totalmente de experiencia y que los estudiantes era personas con "problemas de comportamiento" a muchos de los cuales habían expulsado de más de un colegio.
Entre ellos destacaba una chica, con grandes dificultades de comprensión y por ende, una muy baja autoestima a causa de las burlas de sus compañeros y las muy malas actitudes de algunos de los profesores que le dictaban clase.
Yo dictaba Español, Ciencias Sociales y otra materia que ahora no recuerdo. Pues bien, la chica me decía que no podía entender, que no sabía escribir, que tenía grandes dificlutades para comunicarse porque "era tonta".
Pese a mi corta experiencia y a mi excesiva juventud, simplemente me di cuenta que tenía una "condición especial" y que, aunque en lenguaje y comprensión tenía muchas dificultades, era muy buena en todo lo relacionado con artística y manualidades y que simplemente era disléxica obviamente, su comprensión tenía un nivel diferente al de los demás estudiantes.
Le hice ver eso y enfaticé en que muchos eran incapaces de hacer el dibujo más simple sin que pareciera "hecho de palitos" y además, la convencí para que empezara a leer y a ejercitar más su lectoescritura.
Poco a poco fue mejorando y finalmente, varios años después logró graduarse con buenos resultados, siendo ahora una de mis mejores amigas aún, muchas gracias por eso, se muestra agradecida porque, según ella, "cambié su vida para siempre".
¡Un abrazo enorme amiga Disley, lo lograste!!