Durante millones de años los seres humanos al igual que otras especies han ido evolucionando para así adaptarse mejor a las condiciones siempre cambiantes del medio en el que se encuentra. Desde hace unos siglos atrás historias de ciencia ficción ya hablaban de la creación de máquinas y robots inteligentes que ayudaran a facilitar las funciones o trabajos que realizaban los seres humanos.
Hoy en día, y teniendo en cuanta la rápida evolución tecnológica que se dió durante el Siglo XX, estas historias se han convertido en una realidad. Sin embargo, nace la duda sobre cuáles podrían llegar a ser los riesgos de crear robots con inteligencia artificial y que puedan tomar decisiones autónomas sin depender de instrucciones humanas posteriores a su creación.
Entre las personas que más se han interesado en el tema actualmente, encontramos al magnate Elon Musk, cuyas ideas revolucionarias lo han llevado a crear algunas de las empresas más innovadoras de los últimos años tales como Tesla Motor, Space X, SolarX y Neuralink. Aunque todas sus compañías parecen encaminadas a romper algunos de los paradigmas de nuestra generación, llama bastante atención su compañía Neuralink, la cual se dedica a la Neurotecnología, enfocándose en el desarrollo de interfaces cerebro-máquina para conectar a humanos y ordenadores, buscando potencializar las capacidades humanas por medio de una especie de simbiosis con dispositivos adheridos a nuestro cerebro, al mejor estilo de los cyborgs que vemos en las películas futuristas o de superhéroes. Y quizás te preguntarás, por qué la compañía no crea simplemente robots con inteligencia artificial que tengan las capacidades que busca? Y la respuesta probable sea que Elon Musk ha manifestado en múltiples ocasiones su preocupación por el desarrollo de la inteligencia artificial y la posibilidad de que esta tecnología se nos salga de las manos y termine acabando con nosotros mismos y con el mundo entero. Prueba de ello la encontramos cuando dijo: "Debemos ser sumamente cuidadosos con la inteligencia artificial. Es potencialmente más peligrosa que las armas nucleares". Además de poner sobre la mesa, el dilema sobre si la inteligencia artificial ayudará a facilitar los trabajos del ser humano o más bien acabará con los mismo haciendo a los humanos un tanto inútiles para muchas labores.
Esta es una de las razones por las cuales Musk, prefiere realizar simbiosis entre humanos y partes robóticas antes que crear nuevos robotos autónomas que lleguen a tomar decisiones que sean contraproducentes para nuestra sociedad. Así es como muchas preguntas surgen a partir de estas cuestiones sobre tecnología e inteligencia artifical hoy en día, aunque cada día parece que dependiéramos más de las máquinas y los dispositivos inteligentes.
¿Cuál crees tú que será el futuro de la humanidad si sigue por ese camino? ¿Será que el desarrollo de la inteligencia artificial nos beneficiará o terminará destruyéndonos? Por el momento, parece que solo el tiempo lo dirá, pero recuerda que lo mejor es tomar las prevenciones necesarias ante cualquier duda.
Artículo de opinión escrito por: Julián Andrés Gil Saavedra